viernes, 21 de febrero de 2014

Jane Austen - Orgullo y prejuicio


El matrimonio Bennet tiene cinco hijas casaderas de entre 15 y 23 años. Conseguir colocarlas con un buen casamiento es la única esperanza que puede albelgar la madre, sabedora de que sus hijas perderán su escasa fortuna cuando fallezcan sus padres. La llegada de un joven y rico hacendado, Charles Bingley; revoluciona la pequeña sociedad de pretendientes. Viene acompañado de Fitzwilliam Darcy que se gana pronto fama de distante y antipático. La presencia de los dos jóvenes será el desencadenante de un torrente de pasiones que alcanzará también a Elizabeth Bennet, centro de toda la historia.

Esta novela es grandiosa puesto que no muestra a un príncipe que viene a rescatar a la damisela en apuros, Darcy es un hombre con todas sus imperfecciones a la vista, claro que es millonario y tiene sus secretos (razones por la cual su comportamiento es detestable), es un ser admirable (para mí) por todo lo que hizo para ayudar a su hermana pequeña y a Lizzy. Por otro lado, Elizabeth, tiene una familia complicada, con un padre que ignora a su madre, y ésta última, una señora que intenta casar a todas sus hijas con hombres milloranios.
Personalmente, me enamoré del comportamiento del señor Wickham (claro que al inicio nada más), era tan atento, amigable, modesto (cuando recién lo conoció Lizzy); terminó siendo lo opuesto a lo cual yo creía.